El pasado lunes 3 de noviembre realizamos la ceremonia de Janucá en el Colegio, encendiendo la primera vela. Al llegar el mes de kislev, la fiesta de la luz, se une cada familia judía junto a la ventana de su casa a la hora de encender las velas. Es una fiesta que llena nuestros hogares con el olor de las sufganiot, una festividad llena de luz que
es el secreto de nuestro lazo y unión como pueblo.
Festejamos Janucá en el invierno cuando afuera está obscuro, por lo que el encendido de las velas simboliza la fe judía, una fe con la cual lucharon los makabim para conservar nuestra tradición y vida como judíos en la época de Antiojus. Es una festividad que llena nuestros corazones de alegría y esperanza de un futuro lleno de luz y amor.
Maestra Jessy Turkieh